Una alucinación es una percepción que no corresponde a ningún estímulo físico externo. Sin embargo, la persona siente esa percepción como real. Por ello, la alucinación es considerada como una pseudo-percepción dada la ausencia de un estímulo externo. En ese sentido es distinta de la ilusión, que es una percepción distorsionada de un estímulo externo efectivamente existente.
Existen diferentes aproximaciones teóricas a la causa de las alucinaciones. El mayor peso lo tienen teorías de orden biológico que postulan deficiencias en el funcionamiento normal del cerebro y de las conexiones sinápticas entre células ciliadas y las presentes en el tallo encefálico y en los lóbulos occipital-temporal. Se piensa que es de particular importancia el neurotransmisor dopamina en estas disfunciones. Una explicación más sencilla se refiere a alucinaciones originadas por el propio funcionamiento de nuestro sistema perceptivo. Así hay que comprender que la sensación percibida es una construcción del cerebro a partir del estímulo físico de entrada. Por ello, a veces el cerebro construye sensaciones erróneas cuando no debería hacer nada. Por ejemplo, algunas personas que tienen un defecto en la retina, por enfermedad o accidente, empiezan a ver objetos dentro de esa zona físicamente ciega llamada escotoma. Esto es así porque al no haber señal desde la retina, el cerebro se halla ante el dilema de borrar la zona visual dañada o empezar a rellenarla de forma impredecible. Otro ejemplo de alucinación se da en el caso de miembros amputados en los que el paciente empieza a experimentar miembros fantasmas: los sigue sintiendo a pesar de que ya no los tiene. Esto es así por la misma razón que el escotoma: el cerebro se halla ante el dilema de "amputar" funcionalmente el área del cerebro encargada del miembro amputado o rellenarlo de forma imprevisible.
Los síntomas que las caracterizan pueden ocurrir en cualquier modalidad sensorial: visual, auditiva, olfativa, gustativa, táctil, proprioceptiva, equilibrioceptiva, nociceptiva,
termoceptiva o varias mezcladas.
Existen muchas causas de las alucinaciones, como:
Los estudios muestran que las experiencias alucinatorias son comunes en la población en general (en EEUU). Se ha informado que cerca de un 10% de la población experimenta alucinaciones leves o sutiles. Una encuesta más reciente a unas 13.000 personas, reveló que el 39% de las personas afirman experimentar experiencias alucinatorias vívidas y severas, no necesariamente vinculadas con el uso de drogas. También existen las alucinaciones acústicas o auditivas.
Recomendaciones para su tratamiento y el trato con el enfermo: Una persona que empieza a alucinar y se separa de la realidad debe ser evaluada de inmediato por un profesional de la salud, ya que
muchas afecciones físicas y psiquiátricas que pueden causar alucinaciones se pueden convertir rápidamente en situaciones de emergencia. No se debe dejar sola a la persona.
Una persona que sienta olores que no están presentes también debe ser evaluada por un especialista. Estas alucinaciones pueden ser causadas por una afección grave.
En cuanto al médico, éste elaborará la historia clínica y realizará un examen físico. Además de preguntas acerca de las alucinaciones. Como por ejemplo, por cuánto tiempo han estado ocurriendo,
cuándo ocurren o si usted ha estado tomando medicinas o consumiendo alcohol o drogas ilícitas.
Me parece interesante este tema de las alucinaciones ya que lo desconocía y he descubierto sus síntomas y cómo se pueden detectar y solucionar. Además me ha sorprendido que estas dolencias las
pueden padecer cualquier tipo de persona o producirse por algo externo como las drogas.
José Luis A. López - 2º BHS